miércoles, 16 de mayo de 2007

El reino de este mundo



"Se sintió viejo de siglos incontables. Un cansancio cósmico, de planeta cargado de piedras, caía sobre sus hombros descarnados por tantos golpes, sudores y rebeldía. Ti Noel había gastado su herencia y, a pesar de haber llegado a la última miseria, dejaba la misma herencia recibida. Era un cuerpo de carne transcurrida. Y comprendía, ahora, que el hombre nunca sabe para quién padece y espera. Padece y espera y trabaja para gentes que nunca conocerá, y que a su vez padecerán y esperarán y trabajarán para otros que tampoco serán felices, pues el hombre ansía siempre una felicidad situada más allá de la porción que le es otorgada. Pero la grandeza del hombre está precisamente en querer mejorar lo que es. En imponerse tareas. En el Reino de los Cielos no hay grandeza que conquistar, puesto que allá todo es jerarquía establecida, incógnita despejada, existir sin término, imposibilidad de sacrificio, reposo y deleite. Por ello, agobiado de penas y de tareas, hermoso dentro de su miseria, capaz de amar en medio de las plagas, el hombre sólo puede hallar su grandeza, su máxima medida en el Reino de este Mundo."



El reino de este Mundo, Alejo Carpentier.

2 comentarios:

AMARANTE dijo...

U.U ; yo opino QE OPNIAR ES NECESARIO (8) la grandeza esta en uno , pero ESA palabra qe representa grandeza los putamadres(yo &muchos) no la saben pronunciar (:

Anónimo dijo...

titooo
adivine q???
siiii
soi seca (H) pue kxar coo comentar en esto xD
jauajauajaua
ia kmbiando d tma
leii too i... eso
aun lo toi procesando asiq sin comentarios dcnts!
eso
aiioz